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Definición
Sustantivo femenino. Esta palabra se refiere a cada una de las dos partes, secciones o fragmentos homogéneos o iguales en que se divide o fracciona un todo. Parte de un elemento o cosa equidista en la parte extrema. Adverbio. Casi, aproximadamente o alrededor de, en la misma proporción a partes iguales y homogéneos.
Etimología
Este término en su etimología procede del español antiguo ‘meitad’ y con ella, del latín ‘mediĕtas’, con el mismo significado.
Frase de ejemplo:
Estoy terminando la mitad de la piscina y después debo poner las baldosas.
Igualmente, esta palabra designa al punto que se caracteriza por ser equidistante de los extremos en determinada superficie. Asimismo, se entiende como aquello que posee o que abarca una proporción idéntica que la otra parte, como pudiera ser la mitad de una naranja, de una hamburguesa, de una hoja, etc.
En la cotidianidad, no siempre se mide con exactitud cuál es la mitad más estricta, sino que se aproxima. En la mayoría de ocasiones resulta complejo realizar el cálculo exacto de cuánto pesa o mide algo.
Por ejemplo: “en un viaje en autobús puede suceder algo a mitad de camino; lo mejor es ser precavido”. Esto no implica que quien diga la frase se haya tomado la molestia de calcular con precisión tanto el tiempo como la distancia, del comienzo hasta ese punto y haya efectuado una comparación detallada con los que restan, sino que la idea que pretende comunicar es que el trayecto en este caso, se podría dividir en dos partes.
En lo que respecta de factores como la edad, igualmente se puede utilizar la palabra ‘mitad’, para hacer alusión al enorme contraste entre una persona joven y una mayor. Ejemplo: “deberías acabar esa relación que tienes con Pedro, tienes la mitad de su edad y podría ser tu padre”; a pesar de que esto no resulta del todo cierto con exactitud.
Uno de los rasgos más sobresalientes de este término, es su connotación de neutralidad, pues no se puede calificar como bueno o malo, sino que esa intención la añade el hablante si así lo prefiere. Podemos hablar de la mitad de una pera que es cortada en dos trozos iguales, entonces al mencionar cada una de sus mitades, no figura ningún juicio que las catalogue. Empero, si se utiliza en un contexto en el que por el hecho de haberse partido sea algo significativo, sí aplicaría para un calificativo implícito. Por ejemplo: “Únicamente me dio la mitad de todo lo que gané”. “Esperaba que me diera un 10%, pero me sorprendió al darme generosamente la mitad de todo”.